Cecilia Absatz
No es una remake , no es vintage, tiene una pizca de cada cosa, en proporciones muy adecuadas, y es una caricia desde la letra y desde el buen gusto, que llega cada domingo justo a esa hora…a esa hora que es tan necesario.
Cecilia Absatz nació en Buenos Aires. Es periodista y escritora. Columnista de cultura y espectáculos en diversos programas de radio y panelista en programas de entrevistas de televisión. Traductora de autores como Tibor Fisher y Stephen King. Publicó cinco novelas y un ensayo sobre el teleteatro, Mujeres peligrosas, que obtuvo el Premio Municipal de Ensayo (1994/1995).
Fue columnista en revistas como Para Ti y crítica de teatro, en la revista Noticias. Fue editora del suplemento de espectáculos del diario Perfil y realizó guiones para miniseries de televisión como ¿Dónde estás, amor de mi vida, que no te puedo encontrar?, de Juan José Jusid.
La escritora que, luego de una larga carrera como columnista, ahora prueba exitosamente un nuevo formato semanal con secciones breves en las que opina sobre lecturas, series, películas y también sobre modales, aquello que la fastidia y el uso y abuso de la lengua.
“Tengo una idea para un libro: ‘¿Cómo llegar a viejo?’”. Con esa propuesta, Julieta Ulanovsky apareció un día a visitar a su madre. Sin embargo, ni bien consiguió un inmediato gesto de aprobación, la modificó: “No, un libro mejor no; al mes desaparecen, nadie los menciona. Una newsletter”, dijo la diseñadora gráfica e inspiradora hija de Cecilia, la autora de Viejo smoking, el correo dominical de las seis de la tarde que envía desde mayo a sus suscriptores gratuitos.
Cecilia Absatz y su newsletter “Viejo Smoking”, la sorpresa literaria del domingo a la hora del crepúsculo, donde la periodista y escritora que, luego de una larga carrera como columnista, ahora prueba exitosamente un nuevo formato semanal con secciones breves en las que opina sobre lecturas, series, películas y también sobre modales, aquello que la fastidia y el uso y abuso de la lengua
La newsletter es un boletín con información periódica transmitida por email, un medio al que no le importó que lo creyeran viejo. Está vivo y bien de reflejos como demuestra ¿Cómo funcionan las cosas?, me llevó un tiempo hasta encontrar el tono en el que me sintiera cómoda. Y empezamos”, dice Cecilia Absatz, periodista, escritora, columnista.
Damas y caballeros Cecilia ha puesto en valor la newsletter y cada domingo nos mima el alma, suscribite es gratuito y gratisimo¡¡¡
https://gmail.us20.list-manage.com/
un texto del ultimo domingo
Misterios domésticos
En esta nueva situación de retiro (no me gusta la palabra técnica, así que no la uso) ha cambiado, como es lógico, la relación de cada uno con su propia casa, se hizo más íntima. Ahora descubre cierto enchufe cuya existencia ignoraba, observa los picaportes y sobre todo los contornos de los picaportes que necesitan detergente con urgencia, encuentra ropa que creía perdida y también pierde cosas de la manera más inexplicable. Pierde medias, varios pares. Rápida sospecha sobre el lavadero, siglos atrás. Difícil de comprobar, pero las medias no están. Seinfeld dijo una vez que se las devora el lavarropas, puede ser. Pero también desaparecen lavadas a mano. (Ella no tiene lavarropas.) También se pierden las cucharitas, con alevosía. Queda una sola si hay suerte. Rápida sospecha sobre un uso desaprensivo de la bolsa de residuos. Otro gran misterio –quedan exentas las personas que aman el orden enérgicamente– es el universo que se forma, al parecer surgido de la nada, en la mesa de luz. La austera disposición previa, lámpara, teléfono, pañuelos de papel, hoy es una robusta población de objetos que incluye libretas, lápices y bolígrafos, la cinta metálica de un medicamento (no pregunten), un protector labial, un par de recortes nunca revisados, post-its con números de teléfono que no tuve la precaución de aclarar a quien pertenecen, una botella (chica) de agua mineral y más objetos triviales que parecen reproducirse por generación espontánea. No llega a la gravedad de ordenar un placard pero poner orden en la mesa de luz tampoco promete ser una tarea menor.