POR JAVIER BONET
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En nuestra historia de hoy nos ocuparemos de una deportista que para muchos de nosotros fue la mejor en su deporte. Gabriela Sabatini, una de las figuras más destacadas en la historia del tenis argentino y mundial, se erige como un ícono del deporte blanco. Nacida el 16 de mayo de 1970 en Buenos Aires, Argentina, Sabatini cautivó al mundo con su talento excepcional y su carisma único durante su carrera profesional.
Desde una edad temprana, Sabatini mostró un talento natural para el tenis. Comenzó a jugar a los seis años y rápidamente demostró un potencial extraordinario que la llevó a competir a nivel internacional. A los 14 años, ya había ganado su primer torneo profesional en Buenos Aires, marcando el inicio de una carrera que la llevaría a lo más alto del tenis mundial.
En la década de 1980, Gabriela Sabatini emergió como una fuerza dominante en el tenis femenino. Su estilo de juego elegante y su poderosa derecha le valieron numerosos títulos y la admiración de millones de aficionados en todo el mundo. En 1985, a los 15 años, se convirtió en la jugadora más joven en ganar el Torneo de Miami, un logro que anunciaba su llegada al escenario internacional.
Uno de los momentos más memorables de la carrera de Sabatini fue su victoria en el Abierto de Estados Unidos en 1990. En una final épica, derrotó a la legendaria Steffi Graf en tres sets, convirtiéndose en la única tenista de nuestro país en lograr un título de Grand Slam individual. Esta victoria no solo solidificó su lugar en la historia del tenis argentino, sino que también la consagró como una de las mejores jugadoras de su generación.
También logró dos torneos WTA Tour en 1988 y 1994. Además de su éxito en singles, Sabatini brilló en la modalidad de dobles, ganando varios títulos de Grand Slam y medallas olímpicas representando a Argentina. Siendo el más recordado de esta modalidad el obtenido en Wimbledon en 1988 junto a Steffi Graf. Mismo año que fuera medalla de plata en los Juegos Olímpicos. Esta exitosa carrera, llevó a que en el año 2006 se la incluyera en el Salón de la Fama del Tenis Internacional.
A lo largo de su vida Gabi siguió recibiendo reconocimientos como fueron el ganar el Premio Konex en el año 2000 como Mejor Deportista de la Década. En 2020 declarada Ciudadana Ilustre de la Ciudad de Buenos Aires. Finalmente, el 21 de diciembre de 2022 fue declarada “Embajadora del Deporte Olímpico Argentino” por el Comité Olímpico Argentino.
Retirada del tenis profesional en 1996, Sabatini continúa siendo una figura activa en el mundo del deporte y más allá. Su legado perdura en las nuevas generaciones de tenistas argentinos que ven en ella un ejemplo de excelencia y perseverancia. Además, su impacto va más allá de las fronteras del deporte, ya que ha estado involucrada en diversas iniciativas benéficas y empresariales, demostrando su compromiso con causas sociales y su capacidad para trascender el ámbito deportivo.
Hoy Sabatini se mantiene como imagen de varias marcas y negocios. Muy conocida es su línea de perfumes con fragancias como “Gabriela Sabatini”, “Cascaya”, “Magnético”, “Bolero”, “Viento Salvaje”, “Temperamento” o “Elegance”, entre otras. También participó de negocios inmobiliarios con exgolfista Jack Nicklaus y otros emprendedores.
Por fuera de sus negocios es madrina de escuelas deportivas y colabora con dinero para el desarrollo del tenis, pero con muy bajo perfil.
Gabriela Sabatini no solo fue una campeona en las canchas de tenis, sino también una embajadora del deporte argentino a nivel mundial. Su estilo distintivo la convirtió en una leyenda del tenis, mientras que su carisma y gracia la hicieron una figura querida dentro y fuera del mundo del deporte. Su impacto perdura como inspiración para todos aquellos que buscan alcanzar la grandeza en sus respectivos campos.
